INTRODUCCION.

Tal vez la basura y el desperdicio que hoy en día se acumula en el mundo y en las zonas metropolitanas se convierta en una de las fuentes de energía más grandes del planeta. Actualmente muchos países especialmente aquellos subdesarrollados consideran la basura y el desperdicio como un “problema” (que habría que quemar) esto es un grave error ya que de acuerdo a estudios y utilidad que muchas regiones del mundo le han dado a la basura, ésta se podría considerar uno de los elementos más útiles y productivos de nuestros tiempos. Se dice que mientras exista mayor cantidad de basura mayor es la producción y la capacidad de elaboración de recursos diversos que se podrían generar tal como el reciclaje de papel llamado "desecho de post-consumo" o desechos para la producción de fibras de papel, el reciclaje de metales ferrosos y no ferrosos, el reciclaje de cristales tales como el vidrio común o cristal de boro-silicatos, también la re-hechura de los polímeros en general tales como el plástico simple, el poliuretano, el polietileno, el poli-estireno (anime) usados en la producción de innumerables productos, como telas, lonas sintéticas, cuerdas, abrigos, juguetes y materiales aislantes, además de estos importantes elementos provenientes de la basura también se puede obtener en grandes cantidades el gas metano, al igual que el plomo, el abono para las plantas, elementos carburantes para calentar casas en invierno, (pudiendo ser usado para la exportación) mosaicos que componen las aceras de las ciudades cuyo principal elemento es la goma proveniente de los neumáticos viejos de los autos y un sinfín de otros productos de primerísima necesidad que podrían provenir de la INDUSTRIALIZACION DEL DESPERDICIO, solo que se necesita la infraestructura y mecanización de tales materiales así como la concientización y legislación que la haría posible.

 

En este Proyecto Madre “Desperdicio” se proveerá paso a paso la manera más viable para recaudar los millones de toneladas de “basura” que ruedan por las calles de Caracas y de las diferentes capitales del país y convertirla en un recurso que bien llevado podría solventar los costos de todos los proyectos madres realizados por el estado que nos permitirán en poco años salir del llamado “Tercer Mundo” y hacerle saber a la comunidad mundial con rostro de orgullo que ya no somos un país sub-desarrollado. Ahora caigamos en materia.

Cuando nos referimos a “Basura” generalmente hablamos de materiales físicos que ya no representan un uso individual provechoso y por ello no es reintegrado a nuestra rutina diaria o cotidiana, tal como una bolsa de papel, un periódico viejo, unas cáscaras de huevo o una cava plástica de hielo rota, sin embargo el hecho de no representar un uso individual no significa que éstos no representen un valor socio-económico potencial. Imaginemos que todos los papeles que botamos a diario en una sola ciudad sean recogidos al final del mes y comprimidos (por maquinarias) en pacas que podrían llenar un almacén completo, ¿Se da cuenta cuánto elemento habría allí como materia prima para volver a fabricar nuevas bolsas y periódicos? Pero si los quemamos entonces acabaríamos con ese recurso que pudo haber solventado por cierto tiempo el suministro de materia prima para fabricar nuevamente periódicos o bolsas o cualquier otro producto de papel, es de esta forma cómo trabaja el re-aprovechamiento.

 

Habiendo entendido de una mejor manera la utilidad del reciclaje podríamos ahora llevarlo a distintos ejemplos tales como el destino de esa cava de plástico de hielo rota que al final del mes fue apilada en un inmenso almacén junto a con otros productos similares en material (polímeros) o plásticos (provenientes originalmente de elementos fósiles,) estos plásticos podrían ser lavados, desinfectados y depurados de metales y otros materiales y después de un proceso de clasificación volver a ser triturados y fundidos con la finalidad de fabricar las pacas sólidas o gránulos de distintos plásticos destinados para la venta a industrias que volverán nuevamente a confeccionar enseres y elementos tales como envases, baldes, vasos, platos, cortinas de baño y una gama interminable de productos que no hubieran existido si su principal materia prima (la cava plástica de hielo rota) hubiera sido quemada. Es por ello que quemar la basura no es producente sino contrario al desarrollo.

Se dice pues que la única basura “Cremable” son aquellos desechos provenientes de instituciones u hospitales, acumulados como resultado de una práctica médica que por ser resultantes de seres humanos o desecho animal deben por ley ser eliminados y extintos a fin de erradicar una posible contaminación por virus o agentes biológicos. Existen también los desechos tóxicos cuya manipulación y destrucción debe ser cuidadosa si se toma en cuenta la magnitud o modalidad de sus características corrosivas, bien sean venenosas, reactivas, explosivas, inflamables, biológicamente perjudiciales, infecciosas, irritantes o contentivas de cualquier otras características que representen un peligro para la salud humana, para la calidad de vida de nuestros recursos naturales o nuestro equilibrio ecológico, también existen desechos que en cualquier estado físico, contienen cantidades significativas de sustancias que por el hecho de no degradarse pueden representar peligro para los humanos y la salud de los organismos vivos cuando son liberados al medio ambiente.

Entre los desperdicios peligrosos que debemos evitar y que están regulados en el Convenio de Estocolmo se pueden mencionar los Bifenilos policlorados o llamados (PCB’s), los dibenzo-para-dioxinas (PCCD’s), los dibenzo-furanos policlorados (PCDF’s), el hexaclorobenceno (HCB’s) y los anteriormente mencionados residuos biomédicos, que pueden incluir materiales radioactivos, no obstante este plan madre delimita como basura aprovechable los desechos domésticos y metropolitanos cuya división demarcaría la producción de líneas de plásticos, vidrios, metales, papeles y desechos orgánicos simples (como las cascaritas de huevo) que tendrían como utilización ser convertidas en abono humífero destinado para la agricultura.

 

El Plan Madre “Desperdicio” proveerá para el desarrollo de esta industria seis (6) pasos importantes que después de ser logrados complementarán las bases necesarias para comenzar a convertir nuestra basura en una fuente inagotable de capital para solventarse a sí misma y ayudar a solventar los costos de los demás planes de desarrollo para la nación como son todos estos Proyectos Madre.

Estos seis (6) puntos serán los siguientes:

 

1) Creación de comisión de índole presidencial y grupo jurisprudente (consignados por el Presidente) destinados a estudiar los costos y presupuestos abalados por el estado, utilizados para el comienzo y la culminación de este proyecto con miras a convertirlo en una industria diversificada autofinanciada de varios núcleos.

 

2) Creación, ejecución y fomento de ley que lleve al cumplimiento, la planificación y al buen uso de los desechos públicos.

 

3) Programa de educación y entrenamiento social permanente para lograr la concientización y la importancia de la división de los diferentes tipos de residuos.

 

4) Licitaciones, ubicación y construcción de planta recolectora y procesadora de desperdicios. Planificación de estratagema de recolección. A) Metal, B) Papel, C) Polímeros, D) Vidrios, E) Abono, F) Material no clasificado. (El procesamiento de gas Metano y reciclaje de aceite mineral quedará a discreción del grupo Élite.

 

5) Dirección, administración y comercialización de este nuevo rubro de productos “Hechos en Venezuela”.

 

6) Funcionamiento y producción, venta y distribución. Aprovechamiento de dividendos en pro de la creación de plantas futuras.

 

 

 

Leamos cuidadosamente a continuación estos seis importantes puntos hacia la consolidación de este nuevo recurso para nuestro país.